Comienzo este blog. Son casi las cuatro de la mañana y suena en la radio "Hablar por hablar". No es un programa que me gustara al principio, pero ahora veo que todo el mundo tiene algo que contar y lo valoro. Para un profesor de narrativa es todo un descubrimiento. A veces las historias son vulgares, pero otras tienen lo mágico de lo cotidiano. Como todos deberían saber, la realidad supera siempre a la ficción, pero al crear una ficción basada en la realidad hay que pintarla un poco.
Botellita de Moet et Chandon, o si no, algo más barato para tirar contra el buque mientras el Moet me lo bebo yo a la salud de los que lean este blog que hoy comienza.